Sin mesura
Sin mesura propone un diálogo entre Jesús Alberto Pérez Castaños (JAPC) y Vicky Kylander, dos artistas cuya obra se abraza desde la diferencia. A partir de caminos en apariencia inversos, uno inclinándose en la figuración y la otra desde el desnudo de la forma, ambos comparten su interés por cortejar la pintura desde un hacer intuitivo y visceral. El motivo que los reúne en esta muestra responde a la tentación de examinar lo pictórico desde su propia idiosincrasia, esa que resulta de la pulsión experiencial y se recrea en el gesto para contener tantas historias como queramos percibir. Si sus lenguajes simulan opuestos cuando los revisamos desde la superficie, una mirada detenida advertirá patrones hermanados desde los que asomarse a algunas de las preocupaciones que ocupan el lugar de la pintura hoy.
En 1435, Leon Battista Alberti se refirió al cuadro como “una ventana abierta a la istoria” en su tratado De Pictura. Ya entonces surgieron interpretaciones acerca de lo que esa historia podría significar, planteándose no solo su dimensión narrativa sino también su propia condición plástica. Hasta hoy, la pintura ha atravesado múltiples procesos de redefinición, hibridación y autoexploración pero conserva la capacidad de evocar; de actuar sobre la retina provocando múltiples impresiones. Desde la contención que supone operar a partir del clásico formato de cuadro-ventana, JAPC y Vicky Kylander demuestran la transversalidad de un medio autónomo pero absorbente, capaz de recoger matices de ámbitos como la música, el diseño, la literatura o la cultura popular.
En el discurso de Vicky Kylander el espacio se construye sin mesura entre la concepción y la acción, culminando en la resolución de una presencia háptica que encuentra su balance en la superposición de tramas, colores y gestos trasladados al lienzo desde su experiencia individual. Su pintura oscila entre lo estético y lo emocional, propone un proceso intuitivo donde las imágenes, los sonidos y los silencios se anuncian como breves testigos de una realidad inconcreta, misteriosa y compartida. Por su lado, Jesús Alberto Pérez Castaños (JAPC) opta por una suerte de figuración psicodélica que subvierte las relaciones entre figura y fondo, utilizando la línea y la vibración cromática como elementos unificadores en una obra que bebe del cómic, la ilustración y la cultura popular. Percibimos también el legado de los cartoon, de las películas de serie b y de todas aquellas imágenes o frases que pueblan nuestras pantallas desde las redes sociales. A esta peculiar amalgama de recursos se añade la atracción por indagar entre los lazos comunicantes de la alta y la baja cultura. Se trata, para él, de emular una nueva esfera de lo real sin presunciones ni pretensiones, con el único objeto de dejarse llevar por la vitalidad de lo que nos rodea.
Desde formulaciones plásticas dispares, el concepto que manejan Vicky Kylander y Jesús AlbertoPérez Castaños (JAPC) muestra su intersección no solo en el carácter abigarrado de sus imágenes, sino también en la certeza de transformar instantes, o vivencias, desde una relación desinteresada con el medio, por el mero placer de proyectar sus pensamientos en pintura. Resultan igualmente intrigantes las coincidencias que preceden a la concepción de la obra o su composición: la búsqueda de la imagen, la invocación de estímulos y la atracción selectiva hacia ciertas referencias antes incluso de imaginar la pieza. Si durante el proceso pictórico la forma toma diferentes desvíos, en lo relativo a aquello que habilita el impulso creador encontramos intereses cruzados que abarcan la estética del cómic, la música o la publicidad. Ambos nos hablan de lenguajes dinámicos, populares, vivaces, absorbidos de un modo fragmentario pero con la facultad de ser resituados, interiorizados, para conformar una nueva mirada del mundo. Sus trabajos comparten, además, un imaginario barroco y colorido donde la experimentación se alía con el juego en un acto de gestualidad radical, independiente. Como una imagen que se piensa a sí misma.